18.9.10

El miedo ha vuelto

y con él


el viento. Tus sirenas anunciando otra muerte.



¿Qué voy a hacer con todo esto?



Tu borde. El límite preciso entre tu borde y el mío. Me desarmo, te desarmo y caigo. Y ya no hay límite, ni borde, ni mío.








No quiero darte. Nada. No te lo doy y sin embargo, cuando busco, ya no hay, ya no ha de haber, en mí, en vos.




Yo lo sabía y así y todo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario